Pasándome por el programa radial a través de la pagina web de "La Biblia Dice", me tope con esta pregunta citada por un oyente: Si seria posible realizar un sorteo o bingo en en una iglesia para recabar fondos.
Me sorprendí lo exagerado que están las iglesias de hoy en día, con tal de obtener dinero para ciertos propósitos. Es una clara señal de la apostasía que estamos viviendo.
Sin mas preámbulo, les dejo el texto original extraído de: www.labibliadice.org
Respuesta:
No se imagina cuanto le agradezco por esta consulta amable oyente, porque me brinda la oportunidad de tocar varios asuntos que son conflictivos en la vida cristiana. A lo largo de toda la Biblia se evidencia un principio importante. El fin no justifica los medios. Es un excelente fin o propósito el levantar fondos para construir el templo para una iglesia local, pero eso no transforma en algo bueno el robar, o el mentir o el estafar, para obtener ese dinero.
Dentro de esto justamente cae el tan popular bingo. Si en su país el bingo es lo mismo que en mi país, se trata de un juego de azar. Los participantes compran una cartilla con números impresos al azar. Luego, de una esfera giratoria van saliendo números también al azar. El ganador del premio es aquel que primero llena su cartilla con los números que han salido de la esfera. Note que el azar o la suerte determina quien es el ganador.
En el mundo existe un dicho: No todo depende de la suerte, porque es necesario buscar la suerte. Buscar la suerte en este caso, implica asistir al sitio donde se va a jugar al bingo, implica comprar la cartilla y sobre todo, implica la esperanza en que los números de la cartilla coincidan con los números que salen de la esfera.
Todo es cuestión de suerte amable oyente. Pero ¿qué dice la Biblia acerca de la suerte o la fortuna?
Observe este texto en Isaías 65:11-12. La Biblia dice:
Esta es una reprensión contra Israel. Habían dejado a Jehová y ahora confiaban en dioses paganos llamados Fortuna y Destino. Poner mesa y suministrar libaciones a estos dioses significa adorarlos, poner su esperanza en ellos. Dios estaba tan enojado por esto, que entregó a su pueblo a espada y destrucción. Me aterra lo último que dice el pasaje. Por confiar en Fortuna y Destino, los de Israel hicieron lo que desagrada a Dios. No es prudente por tanto que los creyentes participen en cualquier cosa donde se dependa del azar, de la suerte, de la fortuna, como los bingos, las rifas, los sorteos, la lotería.
Está bien levantar fondos para la iglesia local, pero la mejor manera es por medio de las contribuciones generosas y sacrificadas de los creyentes que se congregan en la iglesia local. ¿Qué le parecería si para construir el tabernáculo, Moisés hubiera organizado un bingo o una rifa, o un sorteo? Terrible, ¿verdad? Lo que ordenó Dios a su pueblo por medio de Moisés fue que cada uno traiga ofrenda para la construcción del Tabernáculo. Éxodo 25:2 en su primera parte dice: Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda.
Cuando el pueblo obedeció a Dios, había tal abundancia que sobraba y Moisés tuvo que ordenar al pueblo que dejen de traer más ofrendas. La obra de Dios amable oyente, se hace con las ofrendas del pueblo de Dios, no con bingos, ni rifas, ni sorteos, ni loterías. Ya es suficientemente malo que los creyentes confíen en Fortuna y por eso participen en bingos, rifas, sorteos y loterías, rifas, pero más atrevido y por qué no decirlo, infame, es que la iglesia toda participe en cualquiera de estas cosas. Usted también nos ha pedido explicación sobre las palabras agorero y sortílego que aparecen en Deuteronomio 18:10-11.
Permítame leer este pasaje bíblico.
La Biblia dice:
En este pasaje bíblico, Dios está demandando que su pueblo escogido se aparte de las prácticas propias de los paganos. En el paganismo era ampliamente aceptado hacer sacrificios humanos y lo típico, practicar adivinación, o practicar agorero, lo cual se refiere a predecir males y desdichas mediante el presagio originado en varias cosas como el canto de las aves, el vuelo de las aves, o de señales que partían de alguna conducta de animales cuadrúpedos o de fenómenos meteorológicos.
Todas estas prácticas debían ser desechadas por el pueblo de Dios y también por nosotros los creyentes. Dios lo considera como abominación. Note lo que dice Deuteronomio 18:12. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti.
Escrito por: David Logacho
La Biblia Dice
Me sorprendí lo exagerado que están las iglesias de hoy en día, con tal de obtener dinero para ciertos propósitos. Es una clara señal de la apostasía que estamos viviendo.
Sin mas preámbulo, les dejo el texto original extraído de: www.labibliadice.org
Un amigo oyente nos consulta acerca de si es no correcto que una iglesia realice bingos o rifas o sorteos para obtener fondos para construir su templo. ¿Qué tiene esto que ver con agorero y sortílego que aparece en el libro de Deuteronomio 18:10-11?
Respuesta:
No se imagina cuanto le agradezco por esta consulta amable oyente, porque me brinda la oportunidad de tocar varios asuntos que son conflictivos en la vida cristiana. A lo largo de toda la Biblia se evidencia un principio importante. El fin no justifica los medios. Es un excelente fin o propósito el levantar fondos para construir el templo para una iglesia local, pero eso no transforma en algo bueno el robar, o el mentir o el estafar, para obtener ese dinero.
Dentro de esto justamente cae el tan popular bingo. Si en su país el bingo es lo mismo que en mi país, se trata de un juego de azar. Los participantes compran una cartilla con números impresos al azar. Luego, de una esfera giratoria van saliendo números también al azar. El ganador del premio es aquel que primero llena su cartilla con los números que han salido de la esfera. Note que el azar o la suerte determina quien es el ganador.
En el mundo existe un dicho: No todo depende de la suerte, porque es necesario buscar la suerte. Buscar la suerte en este caso, implica asistir al sitio donde se va a jugar al bingo, implica comprar la cartilla y sobre todo, implica la esperanza en que los números de la cartilla coincidan con los números que salen de la esfera.
Todo es cuestión de suerte amable oyente. Pero ¿qué dice la Biblia acerca de la suerte o la fortuna?
Observe este texto en Isaías 65:11-12. La Biblia dice:
Pero vosotros los que dejáis a Jehová, que olvidáis mi santo monte, que ponéis mesa para la Fortuna, y suministráis libaciones para el Destino; yo también os destinaré a la espada, y todos vosotros os arrodillaréis al degolladero, por cuanto llamé, y no respondisteis; hablé, y no oísteis, sino que hicisteis lo malo delante de mis ojos, y escogisteis lo que me desagrada.
Esta es una reprensión contra Israel. Habían dejado a Jehová y ahora confiaban en dioses paganos llamados Fortuna y Destino. Poner mesa y suministrar libaciones a estos dioses significa adorarlos, poner su esperanza en ellos. Dios estaba tan enojado por esto, que entregó a su pueblo a espada y destrucción. Me aterra lo último que dice el pasaje. Por confiar en Fortuna y Destino, los de Israel hicieron lo que desagrada a Dios. No es prudente por tanto que los creyentes participen en cualquier cosa donde se dependa del azar, de la suerte, de la fortuna, como los bingos, las rifas, los sorteos, la lotería.
Está bien levantar fondos para la iglesia local, pero la mejor manera es por medio de las contribuciones generosas y sacrificadas de los creyentes que se congregan en la iglesia local. ¿Qué le parecería si para construir el tabernáculo, Moisés hubiera organizado un bingo o una rifa, o un sorteo? Terrible, ¿verdad? Lo que ordenó Dios a su pueblo por medio de Moisés fue que cada uno traiga ofrenda para la construcción del Tabernáculo. Éxodo 25:2 en su primera parte dice: Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda.
Cuando el pueblo obedeció a Dios, había tal abundancia que sobraba y Moisés tuvo que ordenar al pueblo que dejen de traer más ofrendas. La obra de Dios amable oyente, se hace con las ofrendas del pueblo de Dios, no con bingos, ni rifas, ni sorteos, ni loterías. Ya es suficientemente malo que los creyentes confíen en Fortuna y por eso participen en bingos, rifas, sorteos y loterías, rifas, pero más atrevido y por qué no decirlo, infame, es que la iglesia toda participe en cualquiera de estas cosas. Usted también nos ha pedido explicación sobre las palabras agorero y sortílego que aparecen en Deuteronomio 18:10-11.
Permítame leer este pasaje bíblico.
La Biblia dice:
No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos.
En este pasaje bíblico, Dios está demandando que su pueblo escogido se aparte de las prácticas propias de los paganos. En el paganismo era ampliamente aceptado hacer sacrificios humanos y lo típico, practicar adivinación, o practicar agorero, lo cual se refiere a predecir males y desdichas mediante el presagio originado en varias cosas como el canto de las aves, el vuelo de las aves, o de señales que partían de alguna conducta de animales cuadrúpedos o de fenómenos meteorológicos.
Los paganos también practicaban sortílego, esto significa adivinar o pronosticar una cosa por medio de suertes supersticiosas. Los paganos eran dados a la brujería, la hechicería, a los encantamientos. Tenían predilección por los adivinos, los magos y los que supuestamente podían comunicarse con los muertos, es decir el espiritismo.
Todas estas prácticas debían ser desechadas por el pueblo de Dios y también por nosotros los creyentes. Dios lo considera como abominación. Note lo que dice Deuteronomio 18:12. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti.
Escrito por: David Logacho
La Biblia Dice