“Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones”, Hech. 2:42
La perseverancia es determinante en nuestra vida, es una habilidad que debemos desarrollar, una característica del carácter del cristiano. Perseverar es mantenerse constantemente en la consecución de lo comenzado, ya sea en una actitud, en una opinión o una acción.
Un sinónimo de perseverar es persistir, y significa mantenerse firmes o constantes en una cosa; es hacer lo que nos hemos propuesto hacer… hasta ver los resultados. Lo contrario es DESISTIR, y significa abandonar alguna cosa emprendida ya o renunciar a ello.
Para todo en la vida necesitamos la PERSEVERANCIA. Tenemos un enemigo a vencer que hace que abandonemos las cosas y no nos mantengamos firmes en ellas: la NEGLIGENCIA (descuido, omisión)
Es interesante saber que la persistencia está relacionada con nuestros temperamentos de la siguiente manera:
- El sanguíneo empieza algo y lo abandona muy pronto por su indisciplina y desorganización
- El flemático es un postergador crónico: evita a toda costa comprometerse con algo o alguien
- El melancólico es tan perfeccionista, organizado y detallista, que persevera con perfección en lo que se propone
- Pero es el colérico el más determinante de todos los temperamentos: persevera en sus sueños, planes, proyectos y metas hasta que los alcanza o cumple
La perseverancia requiere de esfuerzo, sacrificio, tiempo, tomar decisiones y priorizar actividades. He aquí algunos ejemplos:
- PERSEVERANCIA Y ESTUDIOS: una vez que iniciamos la vida escolar necesitamos perseverar en ello si queremos lograr una carrera universitaria. Un título no se obtiene (honradamente) de la noche a la mañana; se necesita de tiempo y mucho trabajo
- PERSEVERANCIA Y RELACIONES: sean de amistad o de amor, necesitamos invertir tiempo, afecto y otras cosas para lograr establecer relaciones significativas en nuestra vida
- PERSEVERANCIA Y SALUD: para tener buena salud necesitamos perseverar en los buenos hábitos alimenticios y el ejercicio
- PERSEVERANCIA EN LA VIDA CRISTIANA: incluye el perseverar en el temor de Dios, la confianza en Él, en la oración, en la lectura de Su Palabra, en la comunión con los demás creyentes, en las dádivas o generosidad y en congregarnos