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Reflexiones Cristianas Cortas - Llegando de viaje

Había llegado sin fuerzas, sentía cansancio en mis pies, mis hombres caídos; cansancio total. Había pensando mucho en el camino que cuando llegara lo único que haría seria dormir; no había descartado que no se puede conciliar el sueño con hambre hmm puede que ya se hayan hecho socios entre hambre – sueño – cansancio.
Alguien abrió la puerta, tenia una sonrisa inigualable única, nunca había visto esa sonrisa.

Pasa- me dijo – como supo que llegaría hoy – pensé. Siéntate descansa, mientras preparo alimento para Ti- continuo.
Comida yujujuyy dije en mi mente. - me gusta sentirte feliz- dijo. –como sabe que sentí felicidad?- pensé y algo asustada. Seguía con sus sonrisa tenia en la mesa algunos ingredientes que alguna vez había visto . – que irá a preparar?- pensé.

-quieres ver? –dijo- asentí con la cabeza indicando un si.
El cansancio había disminuido, se sentía paz, tranquilidad y su rostro resplandecía , una mirada tierna que trasmitía amor. Su presencia es algo maravilloso que no se puede describir.
Comenzó a mencionar los ingredientes.
Paz, tranquilidad, paciencia, motivación, descanso, honestidad. A base de felicidad y amor.

Estaba servida a lado una taza.
En el primero bocado se fue todo el cansancio, mientras comía curaba mis heridas, acariciaba mis cicatrices y con una voz amorosa dijo. Te amé, te amo, y siempre te amaré; no te dejaré ni te desampararé.
Entonces comprendí la razón por la cual había llegado; no era mi fuerza, no era mi valentía. Era ÈL quien me sostenía y cumplía sus promesas a cada instante.

En el camino de la vida siempre habrá dificultades y problemas. Es para formar nuestro carácter y confianza en nuestro creado, después de todo ÉL está siempre con nosotros todos los días así como lo ha prometido, aunque nosotros lo ignoremos. Dios es fiel y justo ÈL nunca se equivoca.

Autora: Milca Ferrufino

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