Ir al contenido principal

“Se nos ha dado Autoridad” (2)

“…pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”, Hech. 1:8

En Juan 11:41 – 43, Jesús llegó ante la tumba de Lázaro, dio gracias a Dios, le habló a Lázaro y éste resucitó. Nunca luchó en público ni gritó para tener autoridad. Sus luchas las libró en privado. También nosotros necesitamos una vida privada de comunión con Dios; el suficiente tiempo como para salir de la privacidad en total sometimiento al Señor y sin esfuerzo alguno de nuestra parte usar palabras de autoridad.

Recuerda: Nos sometemos porque amamos a Dios. Nos sometemos al hombre o la mujer que Dios ponga por nuestra autoridad en el Espíritu y nos uniremos a la visión que él o ella tengan. El apóstol Pedro dice (5:5): “Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes”. El enemigo te puede resistir y tú lo puedes vencer; si Dios te resiste te tienes que someter. Con soberbia no venceremos al enemigo. Jesús lo venció humillándose, sometiéndose y Dios le dio autoridad. Así que, cuidado, porque las raíces de amargura y de rebeldía nos roban la autoridad.

Ahora bien, ¿Por qué el enemigo tiene el control de muchas cosas si hace dos mil años Jesús le quitó toda la autoridad con su obra redentora? La respuesta es sencilla: porque somos religiosos, caminamos en reglas y normas en lugar de hacerlo en la llenura de Su Espíritu y en la santidad. En ocasiones hacemos tanto esfuerzo para ser cristianos que mientras más esfuerzo hacemos, más nos hundimos en arenas movedizas. Dios proveyó su fuerza, poder y autoridad y se la dio a la iglesia, o sea, TÚ y YO. Los pleitos, chismes y rebeldías deben acabar para que aumente la autoridad.

No debe importarnos el desprestigio o que hablen de nosotros; dejemos que Dios dé testimonio de nosotros. Algunos se enojan por no ser tomados en cuenta; dejemos que Dios dé testimonio de nosotros. En la humillación, Dios nos exalta con autoridad. Lamentablemente, la iglesia opera en un 90 % en la carne y culpa al enemigo por todo. ¿Quieres de Dios? ¡SOMÉTETE A DIOS!

¡La iglesia tendrá autoridad espiritual cuando se someta a los principios divinos!

Entradas populares de este blog

«Sumergidos en Su presencia»

“Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz”, Rom. 8:6 Para poder vivir una vida sobrenatural debemos mantenernos sumergidos en Su presencia. Pero si analizamos nuestra vida y nos ponemos a ver nuestra rutina de trabajo, nuestras deudas, las luchas diarias, ¿es esto vivir sumergidos en su presencia? ¿Por qué? Se nos olvida que como creyentes tenemos algo de mayor significado que cualquier cosa que el mundo pueda ofrecer: ¡las riquezas de la gloria de Dios en esta vida y en la futura! Si logramos comprender esto, NUNCA volveremos a ser los mismos. La llave para vivir la vida sobrenatural es la FE. Actuar por fe es el único camino a la vida sobrenatural (Romanos 5:1 y 2; Hebreos 11:6). Todos tenemos una fe natural; es la fe que mostramos en las cosas ordinarias que hacemos. La fe natural es necesaria para vivir la vida física; pero la Biblia habla de la fe espiritual como “…la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”, (Hebr...

«Corazones agradables a Dios» 1

“…a éste lo envió Dios como gobernante y libertador por mano del ángel que se le apareció en la zarza”, Hech. 7:35   Tener la revelación de Dios en nuestra vida es sumamente importante. La falta de vocación y la ausencia de revelación , son los principales problemas para la plena realización de cualquier disciplina o trabajo. La vocación es una especie de iluminación interna . Dios nos ha dado una vocación para desarrollar algo en especial; algunos de una manera, otros de otra. El que no tiene vocación para una disciplina no tendrá éxito en lo que emprenda, sea en lo humano o en lo espiritual. No sólo la vocación y la revelación son importantes, también es necesaria la preparación . La Biblia habla de grandes hombres de fe que tuvieron éxito en sus vidas. Así, nosotros no lograremos el éxito si en primer lugar no somos los hombres o las mujeres para esa determinada función que estemos realizando. ¿Desde cuándo anhelamos el éxito? ¿Lo hemos alcanzado? Tenemos que retomar primero la i...

“El hombre del estanque”

“… ¿Quieres ser sano?”, Juan 5:6   El estanque de Betesda quedaba por el mercado de las ovejas; la explicación probable al movimiento del agua que ahí tenía lugar es que por debajo del mismo había una corriente de agua que de vez en cuando se agitaba y movía las aguas. La tradición judía atribuía a un ángel el que las aguas se agitaran y que la primera persona que entrara al estanque después de la agitación de las aguas, quedaría curada de cualquier enfermedad. Para el hombre de la historia (Juan 5:1 – 18) , era poco probable que por su enfermedad alguna vez llegara a ser el primero en entrar al estanque después de que se hubieran agitado las aguas. Además, no tenía a nadie que lo ayudara a entrar. Jesús no dio a este hombre una conferencia acerca de la superstición de esperar hasta que se agitaran las aguas. El único deseo de Jesús era sanarlo. Por otro lado, la larga enfermedad del hombre era un rasgo sobresaliente y significativo: treinta y ocho años de enfermedad indicaba desesper...