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Dile NO a la preocupación

Mis queridos amigos, “la bendición del Señor trae riquezas y nada se gana con preocuparse” Proverbios 10:22 NVI ¡Quita el afán de tu vida! Porque no existen razones más valiosas que tu salud para que estés cargado de ansiedad.

Job – al que le llovió sobre mojado – decía: “Pocos son los días, y muchos los problemas, que vive el hombre nacido de mujer” Job 14:1 NVI El hombre estaba hastiado de los sinsabores que rodeaban su vida y ¿tú? ¿Acaso ya te aburrió la vida? Puede que te hayan diagnosticado gastritis, estrés o escuatro… ¡no les creas!
Todos tenemos preocupaciones y problemas… pero tú, ¡créele a Dios! A pesar de las situaciones que se derrumban a tu alrededor o aunque veas una bendición o una respuesta muy lejana… ¡Créele a Dios!

Déjame decirte que siempre tendremos situaciones que se nos irán de las manos y de las cuales no podremos hacer nada al respecto. Es por ello que debemos aprender a vivir el día a día… Es decir, esperar esa bendición de Dios que traerá riquezas pues Él tiene una solución para todo en esta vida.

Pon en las manos de Dios tus problemas y descansa en Él, confía… pues si Dios tiene el control, en cualquier momento cambiará el canal y las cosas marcharán mejor de lo que imaginas.
"Bendito sea el Señor, nuestro Dios y Salvador, que día tras día sobrelleva nuestras cargas" Salmos 68:19 NVI

Déjate abrazar por Dios
Otra versión dice que Dios nos carga mientras estamos preocupados. Esto me recuerda las veces que hemos caminado con Dios y le hemos contado nuestros problemas, preocupaciones o luchas pero cuando hemos volteado a verlo ya no lo veíamos en la escena… ni lo sentimos tan cerca porque solo vemos dos huellas y hemos pensado: ¿Dios me abandono? ¿Será que se canso de mí? Pero es allí donde hemos sentido una voz interna que nos dice: Esas dos huellas son las mías porque cuando tú ya no puedes más, cuando estás tan cargado y afligido… Yo te cargo como un Padre que carga a su hijo cuando se cansa.

Hoy estoy segura que no estarías tan preocupado si supieras que Él te está cargando y que la solución que Dios tiene es la que necesitas.

El día de mañana, Dios nos regala un nuevo amanecer porque sabe que estaremos puestos en pie, fortalecidos y ya no cansados sino Des-cansados en Él.
“En ti confían los que conocen tu nombre, porque tú, Señor, jamás abandonas a los que te buscan” Salmos 9:10 NVI

JAMÁS seremos abandonados cuando lo busquemos, así que recuerda siempre que Dios quiere darte paz en medio de la preocupación. Ven a Jesús, Él no vino por los sanos sino por los enfermos.

Ve hacia tu Padre así como estás en este momento: cansado, afligido o lleno de preocupaciones porque Él te abrazará, te guiará...
“[...] Por todo el camino que han recorrido, hasta llegar a este lugar, ustedes han visto cómo el Señor su Dios los ha guiado, como lo hace un padre con su hijo" Deuteronomio 1:31 NVI

Tu píldora contra el estrés será: Cada mañana le entregaré a mi Dios las cargas y preocupaciones. Iré por la vida abrazada de Él, con la seguridad de que Él jamás me abandonará.

Wenddy Neciosup
www.wenddys.blogspot.com

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